La plantilla de trabajadoras y trabajadores de Bimbo cuenta con apoyo social y político en este proceso de cierre de la planta de Valladolid iniciado por la compañía. La primera gran manifestación organizada reunió el pasado sábado a seiscientas personas por las calles del centro de la ciudad: fue el antepenúltimo capítulo de esta desagradable novela.
El penúltimo ha sido la convocatoria de nueve jornadas de huelga, para meter más presión a la empresa, e intentar que reaccione y escuche las posibles alternativas: días 10, 16, 17, 20, 21, 22, 23, 24 y 25 de octubre. Y el último capítulo hasta la fecha es la entrada en acción de un posible inversor, clave en la ansiada reindustrialización a través de la cual se logre conservar los doscientos puestos de empleo que ahora están en juego (cuarenta de ellos, indirectos).
El comité de empresa tiene reuniones previstas con la compañía el martes y el miércoles de esta semana. En ellas, insistirán en la propuesta de la Fundación Anclaje (constituida por la Junta de Castilla y León, la CEOE, Comisiones Obreras y Unión General de Trabajadores): sentarse a hablar con este posible inversor, y hacer todo lo posible para que la planta no cese la actividad ni se pierdan los empleos.
Las informaciones respecto al grupo interesado en afrontar la inversión se quieren llevar con la mayor opacidad posible desde la Fundación Anclaje, para que ningún factor externo pueda interponerse en las esperadas negociaciones.
La parte positiva es el mencionado apoyo social y político, y también sindical. La manifestación del sábado, con salida en la plaza de Colón, ha dado algo de aire a la plantilla, que se siente arropada de momento. “Bimbo, escucha, estamos en la lucha”, advertían en una de las consignas más repetidas durante el recorrido.
Hace una semana, el martes 1 de octubre, la consejera de Industria, Comercio y Empleo, Leticia García, confirmaba que Bimbo ya había registrado formalmente el Expediente de Regulación de Empleo (ERE) para ejecutar la decisión tomada, por “causas organizativas y de producción”.
