Cada día que pasa es un día más de lamento por las decenas de miles de hectáreas y los daños humanos, naturales y materiales que están provocando los incendios que asolan Castilla y León, sobre todo las provincias de León y Zamora, y también la comarca de la Montaña Palentina.
Localidades como Ponferrada y Astorga ya se han manifestado contra la pésima gestión administrativa por parte de la Junta de Castilla y León, que es la que tiene las competencias en la lucha contra los incendios forestales, y esta semana arranca con nuevas convocatorias de concentraciones, esta vez en León y Valladolid.
En la capital leonesa, la convocatoria es este lunes 18 de agosto frente a la sede consistorial de Ordoño II a las 20:00. En Pucela, la cita es este miércoles 20 de agosto a las 20:00 en Fuente Dorada.
En estos actos se pide la dimisión del presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, y del consejero de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio, Juan Carlos Suárez-Quiñones. El operativo contra incendios, liderado por ellos, resulta inadecuado por la escasa labor preventiva, tanto por las precarias condiciones laborales de los bomberos forestales como la privatización de sus equipos, y por los mínimos medios de los que se dispone cuando llegan las evitables malas noticias de incendios de unas dimensiones tan grandes como los que se están produciendo estas semanas. El abandono de las zonas rurales y el negacionismo climático son otros de los reclamos de estas concentraciones.
También se exige, en estas convocatorias, que se decrete el nivel 3 de emergencias, para que el Gobierno central pase a estar al mando a través del Ministerio del Interior, y que, siguiendo el Plan Estatal de Protección Civil, se puedan movilizar muchos más recursos.




